Entrar por la puerta estrecha

Ama


No, no te arrepientas de amar contra viento y marea, contra prudencia y cálculo, contra seguridad y egoísmo.
Como Dios mismo, ama. Si abrazas, no encadenes, si reprendes, no destruyas.
No escatimes el tiempo, la ternura o las lágrimas.
No aprisiones los recuerdos, no embrides las historias.
Con libertad y afecto, ama. Con incertidumbre y compromiso.
Con el corazón en carne viva y las manos abiertas.
Con la fecundidad de quien engendra esperanza en silencios, canciones y versos.
Aunque tu amor sea imperfecto, ama. Es mejor intentarlo que endurecer la entraña para no arriesgarlo todo.
(José María Rodríguez Olaizola, sj)

 

Liturgia

Enlace permanente a este artículo: https://www.divinomaestro.com/?p=7102