Viernes Santo

Manos del Viernes Santo

Hay manos crueles.
Señalan, violentas, apuntando al justo. ¡Que muera!
Se lava las manos quien no se complica ni con la justicia, ni con la verdad.
¡Que muera!
Aplauden, absurdos, quienes de todo hacen un espectáculo.
Libera a Barrabás.
Y ese, ¡que muera!
Agarran el látigo, trenzan las espinas, despojan de ropas, empuñan el mazo o clavan en cruz, las manos serviles de quien obedece a normas injustas.
¡Que muera!
Pero hay otras manos que ofrecen alivio, enjuagan cansancios, comparten el peso, acogen un cuerpo, esconden el rostro surcado por lágrimas, o se alzan al cielo en muda plegaria.
Y luego, sus manos, traspasadas.
¿Dónde están las tuyas?
(José María R. Olaizola, SJ)

 

Enlace permanente a este artículo: https://www.divinomaestro.com/?p=7652

Jueves Santo

Que lleguen gastadas las manos al fin de la vida por haber acariciado el mundo,
por haber tocado a los impuros, por haber curado llagas y lavado los pies embarrados de amigos y enemigos.
Manos fuertes por haberse interpuesto en el camino de las armas, por haber golpeado los muros, por haber forjado puentes, por haber partido el pan que ha de saciar a tantos.
Manos curtidas en la brega, en la siembra, en el remar cotidiano.
Manos abiertas para acoger la congoja del que llora, del que espera, del que solo pide un amor posible.
Que sean las manos hogar, refugio y hoguera.
Y que cuenten, en su idioma silencioso, que no estamos solos.
(José María R. Olaizola, SJ)

 

Enlace permanente a este artículo: https://www.divinomaestro.com/?p=7644

«Hosanna el que viene en nombre del Señor»

Lo que nos hace cristianos es seguir a Jesús. Nada más. Este seguimiento a Jesús no es algo teórico o abstracto. Significa seguir sus pasos, comprometernos como él a «humanizar la vida», y vivir así contribuyendo a que, poco a poco, se vaya haciendo realidad su proyecto de un mundo donde reine Dios y su justicia.

Esto quiere decir que los seguidores de Jesús estamos llamados a poner verdad donde hay mentira, a introducir justicia donde hay abusos y crueldad con los más débiles, a reclamar compasión donde hay indiferencia y pasividad ante los que sufren. Y esto exige construir comunidades donde se viva con el proyecto de Jesús, con su espíritu y sus actitudes.


Liturgia del domingo

Enlace permanente a este artículo: https://www.divinomaestro.com/?p=7631